Refutando a Alienigenas Ancestrales:  Las Calaveras dé Cristal

por Chris White

Traducción por Javier Delgado R.

Ancient Aliens: "Belice, América Central. En 1924 el aventurero británico Frederick Mitchell-Hedges viajó a este país con su hija Anna para explorar las ruinas de la antigua ciudad maya Lubontoon. Una tarde Anna trepó a la cima de una ruinosa pirámide, con la esperanza de ver el océano."

AA: "Era medio día y ella estaba en la cima y la manera en que el sol caía; por la manera en que las rocas se habían movido, había una angosta abertura y la luz del sol pasó a través y tocó la parte superior de la calavera." Ella bajó corriendo y estaba muy emocionada y dijo 'hay alguien allí dentro con una linterna'. El padre de Anna y los demás del grupo eran demasiado grandes para caber dentro de la angosta abertura de la pirámide, así que ataron una cuerda alrededor de Anna y la bajaron por el agujero. Cuando subió de nuevo, Anna sostenía la parte superior de una extraña calavera de cristal. Una búsqueda subsecuente descubrió la mandíbula correspondiente."

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Como puede usted sospechar, nada de lo que acaba de escuchar es verdad. La verdadera historia de la Calavera de Mitchell Hedges (MHS por sus siglas en inglés) es muy diferente. Vale la pena mencionar que la razón por la que Ancient Aliens se centra en la MHS es por que se ha demostrado que el resto de las calaveras de cristal conocidas son imposturas [1] e incluso Ancient Aliens lo admite.

AA: "Análisis científicos han determinado que las dos pertenecientes al Museo Británico y al Musée du quai Branly en París no eran auténticos artefactos pre colombinos."

La MHS era la última esperanza de una calavera de cristal genuina, y la única razón para ésto es que la hija de Mitchell Hedges mientras vivió se rehusó a permitir un estudio oficial para determinar su origen. En lugar de ello, se dedicó a mostrarla en convenciones New Age y similares, hasta su reciente muerte.
Su viudo, sin embargo, en 2007 llevó la calavera al museo Smithsoniano de historia natural donde se le realizaron análisis extensos. Resultó ser una impostura, justo como las demás.[2] No estoy seguro si Ancient Aliens produjo este episodio antes del 2007, pero sospecho qué no les habría importado en cualquier caso.

La verdadera historia de la MHS comienza con otra calavera de cristal que se encontraba en el Museo Británico, y de la cual copiara el falsificador de la MHS.[3]

El Museo Británico adquirió una calavera de cristal en 1898, justo después de que hubieran sido inventadas las herramientas que hacían posible tallar tales artefactos. En la actualidad se sabe que fue en esa misma época que varios artefactos de cristal fraudulentos fueron vendidos a algunos museos.[4]

La calavera del Museo Británico, que también tiene una historia truculenta, fue más tarde revelada como una impostura, pero en la década de los treintas aún se creía que era genuina y era orgullosamente expuesta en el museo.[5]

Con base en los estudios realizados por el museo Smithsoniano a la MHS, se pudo concluir que el falsificador de la misma copió la del Museo Británico con el fin de hacer la suya parecer más auténtica.[6] Originalmente la MHS perteneció a un hombre llamado Sydney Burney, de quien se tiene registros que pasó diez años tratando sin éxito de venderla a varias personas. Terminó vendiéndola en 1943 a un miembro del público en una subasta de Sotheby's en Londres.[7] El comprador fue Frederick Mitchell Hedges (FMH).

De hecho tenemos la carta que FMH escribiera a su hermano justo después de comprar la calavera en la subasta, y en la cual expresa su emoción por su nueva compra - éste dato será importante más tarde.[8]

Cinco años más tarde, en un periódico local, FMH alardeaba de haber encontrado él mismo la calavera durante una expedición a Centroamérica.[9]
FMH era un reconocido cuentista y muy seguido vendía sus imaginativas historias a los periódicos de Hearst. En estas historias él mismo solía ser el protagonista.

Por ejemplo, FMH era de oficio pescador, y solía tener historias de haber atrapado animales nunca antes vistos; batallas contra monstruos marinos; historias de tiburones antropófagos, así como las típicas anécdotas de pescadores.
Más tarde en su libro "El Peligro, mi Aliado", contó anécdotas de haber descubierto tierras y grupos humanos desconocidos, así como de haber luchado contra todo tipo de peligros de la jungla.

Después, personas que visitaron los lugares donde él dijo haber estado, publicaron editoriales desenmascarándolo públicamente.[10]

En el mismo tenor, se demostró que FMH falsificó un evento bizarro que incluía un supuesto robo y varias cabezas reducidas. Incluso perdió una muy comentada demanda por difamación concerniente a éste evento. Pero todo ésto solamente roza la superficie de los engaños que rodean a la MHS.[11]

Para empezar, ninguna de las historias acerca del descubrimiento de la MHS coincide con las demás, y todas contradicen la carta enviada a su hermano en 1943, donde claramente menciona haberla comprado en una subasta. En la carta se lee:

"La 'Colección' crece y crece y crece. Probablemente hayas visto en los periódicos que adquirí esa sorprendente Calavera de Cristal que solía formar parte de la colección 'Sydney Burney'. Está hecha a partir de un solo bloque de cristal de roca transparente, a escala real; los científicos la datan antes del 1800 a.C., y estiman que tomó cinco generaciones, pasando de padres a hijos, completarla. Es antropológicamente perfecta en cada detalle, una pieza suprema de artesanía. Se sabe solamente de otra similar en el mundo, que se localiza en el Museo Británico y es sabido que su calidad es inferior."

Muchos años más tarde, cuando esta carta fue dada a conocer, su hija adoptiva Anna trató de explicar la discrepancia en su sitio web:

"En 1943 MItchell-Hedges se vio envuelto en otra controversia que sigue viva actualmente en algunas partes. En los tiempos anteriores a las alarmas contra robo, no era inusual dejar artículos valiosos con amistades si uno se ausentaba por largos periodos de tiempo.

Mitchell-Hedges hizo ésto con un amigo de la escuela, Sidney Burney, quien siempre mostró interés en la Calavera de Cristal. Sin embargo, en 1943, Burney inexplicablemente puso la Calavera de Cristal a subasta en Sotheby's de Londres.
Mitchell-Hedges se enteró de ésto justo el día anterior y se enfureció tanto que por un tiempo le fue imposible hablar. Incapaz de contactar a Burney, se levantó el día siguiente a las 5 a.m. y viajó a Londres para recuperar su propiedad.

Sotheby's le informó que el vendedor era el hijo de Sidney Burney. Cuando se rehusaron a retirarla de la subasta, Mitchell-Hedges se dio cuenta de que la manera más sencilla de recuperar su propiedad era comprarla. Lo que hizo por 400 libras."
Ésto no tiene sentido por muchas razones, dejando de lado por un momento que de acuerdo con la versión de Anna, ésto significaría que FMH tuvo la calavera por 10 años y nunca se la mencionó a nadie sino hasta después de escribirle una carta a su hermano una década más tarde, claramente dando a entender que se trataba de algo recién adquirido por vez primera.

Después de la muerte de FMH la calavera fue heredada por Anna Mitchell Hedges, su hija adoptiva, y es aquí que las cosas se ponen verdaderamente truculentas.

Anna se pasó el resto de su vida tratando de vender la calavera. Contrató a un hombre llamado Frank Dorland, comerciante de arte, quien hizo publicidad a la calavera para que ella pudiese venderla. Dorland había trabajado con FHM en el pasado tratando de vender otro de sus objetos, que también resultó ser falso.[12]

Ella y Dorland firmaron un acuerdo en julio de 1964 según el cual él haría publicidad a la calavera y el precio de venta no debía ser menor a 50,000 dólares.

Dorland se puso manos a la obra tratando de hacer que todo luciera muy oficial, incluyendo el inventar una historia diferente para el descubrimiento de la calavera. Después del acuerdo con Dorland en 1964 fue que por primera vez Anna declaró haber sido ella, no su padre, quien descubriera la calavera.[13] Hecho que nadie más mencionó en los 30 años anteriores.

De esta manera Anna se volvió la única persona capaz de establecer el origen de la calavera, algo que un potencial comprador querría, especialmente un museo. Y dado que todos los demás involucrados estaban muertos para esas fechas, no había nadie capaz de contradecir la nueva historia.

Todas las historias místicas acerca de la calavera nacieron de los dos libros que el publicista Frank Dorland comisionara con el fin de promoverla.

He aquí una carta que Dorland envió a Anna acerca del escritor que quería para uno de los libros.
"He convencido a Dick Garvin (escritor que vende) que vale la pena el porcentaje para usted y yo, y que usted proporcione la información. Esto lo hace un mejor libro, hace más dinero para todos. La calavera no se vende, se la usa de esta manera y en apariciones públicas para incrementar las ventas y generar interés. (OC 276, folder #11 – 3/10/1970)"

Los libros hacen declaraciones extravagantes acerca del origen y poderes de las calaveras de cristal, y dado que fueron escritos en lo álgido del movimiento New Age tuvieron una audiencia entusiasta y poco crítica.

Durante todos estos años trataron desesperadamente de vender la calavera. El problema era que, debido a todas las falsificaciones, los museos estaban pidiendo ahora validar las calaveras antes de comprarlas. [14]

Una carta del Museo Británico a Anna muestra que las negociaciones se detuvieron cuando el curador se enteró de la verdadera historia de la calavera.

Nada de lo anterior detiene a Ancient Aliens a la hora de promover toda clase de historias contradictorias acerca de la calavera.

AA: "Sí, son artefactos alienígenas. Algunas personas incluso piensan que fueron hechos en otro planeta.

AA: "Fueron creados específicamente para almacenar registros de civilizaciones extraterrestres. Existía una leyenda según la cual eran 13 las calaveras y que cuando las 13 calaveras se unan algo importante cambiará en el mundo".

AA: "Una leyenda sugiera que hay 12 mundos adicionales allá afuera -planetas que están habitados por especies inteligentes. Estas 13 calaveras de cristal que se supone existen en el planeta Tierra fueron traídas cada una de uno de esos 12 planetas, y la 13ava calavera es la que aparentemente contiene toda la información acerca de esos 12 diferentes reinos... y esa es la leyenda de las 12 calaveras de cristal."

AA: "Pero, como los teóricos de los Astronautas Antiguos sostienen, ¿por qué los visitantes extraterrestres les habrían dado la calavera de cristal a los Mayas?"

El único problema es que nadie parece capaz de encontrar un registro de esta profecía maya.[15] La idea parece haberse originado con un escritor del New Age. Los especialistas en cultura Maya nunca han escuchado de esa leyenda... y ciertamente tampoco de ésta:

AA: "Muchos nativos y muchas de las personas que trabajan con calaveras de cristal afirman que las calaveras con un alto contenido de cuarzo, y especialmente las calaveras de cuarzo, son la más alta frecuencia o energía o vibración posible en el plano físico, y así muchas gentes nativas adoraban o cuidaban estos objetos porque sabían que poseían, o sentían que poseían, la más alta energía posible en el plano Terrestre."

Todo este mito nació de una campaña de mercadeo para un artefacto fraudulento, un mito que encontró su hogar en la corriente New Age.

En conclusión, se ha demostrado que todas las calaveras de cristal conocidas son fraudes. El último reducto (la MHS) fue considerada posiblemente genuina solo porque, hasta recientemente, no se había permitido que se la examinara. Su historia está llena de avaricia y mentiras, y su autenticidad solamente podría ser aceptada por los más dedicados entusiastas dados los hechos que ahora conocemos.

 

 Referencias

 



    • 1] British Museum (n.d.-b), Jenkins (2004, p.217), Sax et al. (2008), Smith (2005), Walsh (1997; 2008)

    • nota: el en lace correcto para las siguientes referencias es:

    • http://archive.archaeology.org/online/features/mitchell_hedges/

    • [2] Jane MacLaren Walsh. "Archeology.org – The Skull of Doom", May 27, 2010. Skull of Doom

    • [3] Ibid.

    • [4] Ibid.

    • [5] Ibid.

    • [6] Ibid.

    • [7] Ibid.

    • [8] Ibid.

    • [9] Ibid.

    • [10] Ibid.

    • [11] Ibid.

    • [12] Ibid.

    • [13] Ibid.

    • [14] Ibid.

    • [15] Aldred (2000, passim.); Jenkins (2004, pp.218–219). En éste trabajo posterior, Philip Jenkins, ex Profesor Distinguido de Historia y Estudios Religiosos y recientemente Profesor Patrocinado de Humanidades en PSU, escribe que las calaveras de cristal están entre los más obvios ejemplos donde la asociación con la espiritualidad Nativo Americana es un fenómeno "históricamente reciente" y una síntesis "artificial". Son "productos de una generación de creativos empresarios de la espiritualidad" que no "[representan] las prácticas de ninguna comunidad histórica".


 

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Alienigenas ancestrales refutado

Traducción del texto, por Javier Delgado, para TenMEx